Pasacalles
El circo ambulante
El Circo Ambulante es un pasacalles que recorre la ciudad. Está compuesto por una insólita troupe de 4, 6 u 8 grotescos personajes. Ponen en escena un dinámico y arriesgado conjunto que invita a entrar en un mundo onírico del circo.
El Circo Ambulante llega a la ciudad tras recorrer caminos y plazas, y no deja a nadie indiferente. El Circo Ambulante es apto para todos los públicos y se puede adaptar a diversos espacios escénicos.
Blanka: fantasía y leyenda
Blanco es el color de la nieve, el color de la niebla, de las nubes y la luna, de la espuma del champán...
En este pasacalles participan 6 blancos personajes que llegan desde el remoto pueblecito Vigyloss al norte del planeta. Una hechicera que realiza acrobacias sobre una gran estructura móvil de 3x3m, y una corte de personajes inverosímiles que crean una atmósfera onírica.
6 personajes que se unen y se separan en escena, que se detienen para sorprender con acrobacias y equilibrios y malabres, que envuelven al público en un ambiente mágico y elegante, real e increíble, donde todo parece posible.
Los Duendes de Nagaroth
En la tierra lejana de Nagaroth, habitan unos curiosos duendes, mezcla de enanos y elfos.
Unos seres que en época estival se dedican a viajar para encontrar unas nuevas tierras fértiles donde vivir y hacer trastadas.
Estos duendes son los más traviesos, juguetones y bromistas, allá por donde pasan, jamás son olvidados. Quizás, hoy, te los encuentres a la vuelta de la esquina o saltando por tus calles y plazas.
El Paseo de la Anjana
Cuenta la leyenda que, en los profundos bosques de la cordillera cantábrica, vive la Anjana, un hada buena, ninfa de la montaña de extraordinaria inteligencia y gran hermosura. Ella protege a las gentes honradas y si tienes la suerte de encontrarla te aportará buena fortuna.
Pasea acompañada siempre por su séquito de fuertes enanucos, equilibristas y malabaristas de carácter juguetón, y pasan el día transitando los senderos del bosque, preparados para ayudar y proteger a quien lo necesite.
